» Erase una vez un barrio que un día se despertó sin recordar qué era. Le perseguían los guardianes de las esencias, las instituciones y las excavadoras del progreso. ¿Bastión de la autenticidad? ¿Moderno idiota? ¿Un capítulo de Lonely Planet? Tal vez nunca sepa quién es realmente. «
Por Xavi Sancho. Revista Barcelonès. Nov 2010, nº5
Después de un par de paseos por Barcelona y de encontrarme por casualidad un articulo como este he decidido escribir sobre el tema.
En los últimos años he tenido pocas oportunidades de ir en plan paseo por el casco antiguo de la ciudad condal, concretamente por el Born, así he podido constatar con facilidad un cambio importante que se ha ido gestando en el carácter del barrio. Como bien explica Xavi Sancho en la serie de ejemplos que describe en su artículo, el Born ya no es lo que era. Cada vez más se está degradando esa idea de reducto cosmopolita, moderno, lleno de opciones de ocio alternativas y diferentes para verse invadido por el efecto trendy y el consiguiente turismo. Poco a poco va desapareciendo la oferta de locales con encanto y pequeñas tiendas regentadas por un solo propietario para ser sustituidos por heladerías, souvenirs y restaurantes con precios inconsecuentes.
A pesar de mi edad aún llegué a conocer el Born en pleno auge de modernidad, donde entre otras cualidades se encontraba la mayor parte de la oferta nocturna de calidad de la ciudad. Recuerdo mirar hacia arriba, hacia esos edificios e intentar adivinar el precio inalcanzable que pedirían por un ático en la ajetreada rambla.
Es una pena ver como durante el día los turistas y por la noche las cervezas y samosas a un euro se están haciendo con las calles en detrimento del Born, el taller de ideas donde se concentraban fotógrafos, diseñadores y estudios de arquitectura. Como se describe en el artículo el Born es la imagen de un pasado rico, un presente polémico y un futuro incierto.
